Flames Barcelona: La crew urbana de running de Barcelona

De Francia a la costa Vasca persiguiendo pintxos

Behobia / San Sebastián es más que una carrera. Es una cita señalada con tanta tradición que le hace la competencia a la Navidad, donde miles de runners hacen un peregrinaje hasta una esquina del País Vasco para disfrutar de una carrera tan especial como la emoción y las sensaciones que la rodean. Esta es la experiencia de primera mano de Bárbara.

8:00. Hora de salir.

El primer grupo de Flames Barcelona sale desde el Hospital de Bellvitge (punto de encuentro) hacia San Sebastián. Los nervios están a flor de piel. Sensación conocida para unos, desconocida para otros. Pero este grupo cuenta con un conductor de primera, y mejor atleta: Rubén. Blanca, Fabien y Aitor tienen un viaje muy entretenido. ¡Sólo les falta esperar al segundo grupo! Pero el tiempo pasa rápido. Entre pintxos y cervezas las horas vuelan, literalmente.

De repente, una llamada. A las 16h ¡el segundo grupo ya está en camino! Álex, Bárbara y Javi ya están listos para quemar el norte. ¡Casi todo Flames viene! Estamos impacientes por llegar. Nos dan las 22h y todavía no llegamos a ver las luces de la ciudad. Con Los Trabubus de fondo (idea de Álex que encaja muy bien).

Nos saludamos efusivamente como si no nos hubiéramos visto en años.

Y llegó el sábado.

Comenzamos el día con un desayuno bien completo en una tasca típica Vasca, seguida de un “slow shake out run”, simplemente para soltar piernas y conocer un poco la ciudad. Las vistas de San Sebastián son increíbles. Si no conoces la ciudad, debes subir corriendo al castillo. Vale la pena. El resto del día se va a base de comida, más comida y quizás charlas sobre pintxos. Ah, y recogemos el dorsal. ¡Casi 26.000 runners participan! Es impresionante. No imaginaba tanta gente corriendo junta.

Behobia/San Sebastián bibs

En la feria tomamos muchas fotos del grupo, aprovechamos para visitar los stands de la expo y planeamos nuestra “pasta party” particular. “Cocinamos” (de hecho, Aitor hace de chef del día) unos espaguetis con mucho queso y varias salsas para elegir, todo bien temprano. Ya sólo queda descansar. Pero con mis nervios, porque esta carrera es mi primera carrera larga, no puedo dormir. Mi tos tampoco ayuda. Toda la semana he estado enferma y no tenía claro si iba a poder competir.

¡Amanece el día de la Behobia!

Estoy muy emocionada. De hecho, todos. Hemos quedado a las 7:30. Muy pronto dado que el viaje hasta Behobia es largo y la ola de salida del primer runner (Aitor) es bastante temprana.

Behobia/San Sebastián pre-race group photo

Tengo que esperar hasta la ola de las 12:35 para empezar, así que en la práctica he visto a todo mi equipo salir. Javi también, siendo su primera Behobia/SS como yo. Es mi principal apoyo. Tomo mis sales minerales antes de empezar. Pongo mi Maurten en el cinturón. Me toca. Estoy muy nerviosa, pero en el buen sentido. No voy a hacer marca, sólo a disfrutarla. El recorrido es muy agradecido y lleno de personas animando. ¡Nunca había visto algo así!

Los primeros 15 km pasan muy rápido. Estoy tan feliz y pendiente de todo lo que me rodea que no me doy cuenta si estoy cansada o no. ¡Pero no lo estoy! Al acabar, me falta tiempo para ver a mi crew por que sé que estarán ahí en los últimos metros esperándonos, haciendo fotos y animando. No me equivoco. ¡High five!

Acabo cansada pero ha valido la pena. Es una experiencia única. Sólo quiero beber agua, tengo sed. Ni tan siquiera estiro (lo sé, mal hecho… no me regañéis pero sólo pienso en reunirme con Flames y celebrar con un txacolí). Lo primero que pensamos es en encontrar un lugar para comer, ya que hay tal cantidad de gente por las calles hoy… Así que antes de irnos, degustamos más pintxos.

Después, una ducha para relajar los músculos ¡y para ser un poco limpitos! Cambiamos de compañeros de coche. Los que tenemos que trabajar mañana vamos con Javi: Blanca, Ahmed y yo. Y así, en la carretera, termina este viaje.

Bárbara at the starting line